martes, 5 de mayo de 2015

Novillada con picadores en Valladolid

Tarde de sol y moscas en el coso del paseo de Zorrilla en el que se anunciaba una novillada con picadores para dos prometedores sevillanos y el local Ricardo Maldonado, aforando algo mas de 1/3 de plaza.

Tardó en tomar los vuelos del capote un novillo alto que echó la cara a la montura del picador tras su frío arranque al que quitó por chicuelinas. Le cogió Lama de Góngora rápido el aire por la diestra, mano con la que fue alargando las embestidas, pitón por el que salia con la cara alta de la muleta. Con la izquierda le sonsacó naturales sueltos de bella factura, retomando la diestra ya con el toro parado sacando alguna gota de agua de un pozo seco. Hubo, tras el espadazo, de descabellar en varias ocasiones antes de que sonara un aviso. Recibió saludos desde el tercio. 

De fea embestida fue un cuarto que cabeceó desde su encuentro con Paco. Brindó el sevillano a César Rincón, Firmeza administró en las embestidas en varios tiempos del novillo, tragó con los continuos cabeceos y parones intentando sacarle las embestidas con sacacorchos, ni por esas embistió el novillo. Se atascó con la tizona, que hizo guardia tras un primer pinchazo, dejando media, el descabello acabó tumbando al del torreón. Silencio

Ricardo Maldonado tenia la moneda del destino en la mano, sabedor de ser su tarde no se dejó nada en el tintero, saludó al segundo, que se desentendió de las telas, remató a pies juntos la media. Derribó el novillo al picador en el primer encuentro, viviendose momentos de gran angustia al ver como el toro se encelaba con el caballo al que logró inferir tres cornadas en patas y cuello, en banderillas puso en apuros a la cuadrilla que hubo de tirar de orgullo en su plaza. Brindó a su madre antes de doblarse x abajo en el inicio de faena, firmeza le puso con la diestra, se relajó con la zurda, llegando los olés del tendido en cada natural, cambios de mano incluidos, marró con los aceros que entraron a la tercera, perdiendo una oreja de regusto que quedó en vuelta al ruedo.

En el quinto, negro zahino de pelo, al que fue sacando a los medios por verónicas. Picó Pedro Iturralde, quien se llevó una sonora ovación tras dejar dos puyazos en toda la yema, quitó en su turno Muñoz de dos verónicas y media, sin molestar. contaba la tercera tanda con la diestra cuando se solaparon temple y calidad, dejandole la franela en el hocico, asi logró la conjunción que levantó la faena y puso las gradas con la vista en sus muñecas. Largos fueron los naturales, de los de inmortalizar en óleo, volvió a la diestra por momentos antes de juntar los pies que miraban a la cara al toro y dar el medio pecho para plasmar en la retina los mejores naturales, no mas de tres, suficientes para encandilar y llevar a soñar a la mente que habia soñado realizarlo a la sombra de un pinar. Un pinchazo no restó importancia a la estocada en todo lo alto que hizo rodar al toro de forma fulminante. Entre lágrimas de éxito, rabia y emociones paseó las dos merecidas orejas, siendo ovacionado el toro en el arrastre.

Mucha gracia imprimió José Ruiz Muñoz en el saludo capotero por verónicas, quitando posteriormente con dos chicuelinas y una media de cartel. Argumentó toda su faena con la mano diestra en el tercero, siendo desarmado por el nulo izquierdo. Se pasó por la bragueta al novillo que acabó rajándose. Cobró una estocada tras pinchar y recibió leves palmas. 

Silenciado frente al jabonero cierraplaza con el que le faltó acople, y en el que el quite con el capotillo de menudo tamaño y los remates pintureros Curristas fueron lo mejor de la faena.

A hombros abandonó el coso Ricardo Maldonado, escoltado por los jóvenes que le llevaron a hombros hasta el exterior.














































































































Ficha del festejo:
1/3 de plaza, novillos de El Torreón, de exquisita presentación y desiguales de juego, destacando el desorejado quinto.

Lama de Gongora: (azul cielo y oro)  palmas y silencio
Ricardo Maldonado (pistacho y oro) vuelta y dos orejas
Jose Ruiz Muñoz (verde botella y oro) palmas y silencio