jueves, 29 de enero de 2015

Eliminatoria Bolsín Taurino Mirobrigense

Debutábamos a la par que la ganaderia de Barcial en el Bolsin Taurino Mirobrigense, el de mayor solera del pais, no faltaron nervios y ganas, las mismas que los aspirantes. Para entrar en ambiente que mejor que pasear pos sus centro histórico, admirando cada una de las fotografías que cuelgan de las paredes de sus bares, un vino para tomar valor, no fuera a ser que llegada la hora temblara el pulso. 

Llegamos a la coqueta plaza de tientas del Hotel Conde Rodrigo II y alli entre saludos aqui y allá con puntualidad comenzó el sorteo que decidiera el turno de actuación de los 18 aspirantes dispuestos a pasar a la siguiente ronda. El sol tampoco quiso perderse la tienta y aunque la temperatura era baja fue de agradecer un rayo y el nulo viento.

Tras el sorteo el orden de participación fue el siguiente -y tengo que dar las gracias a mis dos "secretarias" por la labor de tomar nota sin dejar escapar uno a pesar de oirse mal el nombre- 
Albertó Alcalá
Daniel Garcia
David Salvador
Ignacio Olmos
Jamadi Rakdani
Diego Aznar
Jose Miguel Arellano
Francisco Manuel Jurado
Rubén Robles
Luis Miguel Naharro
Santiago Sevilla
Jose Manuel Ruiz
Fernando del Rocio
Rubén Blazquez
Miguel Angel Pacheco
Jesus Guerrero
Jose Maria Hidalgo
Alberto Martin

Divididos en terna por vaca, actuando en dos rondas cada uno, se las vieron ante las serias vacas, alguna utrera, de la prestigiosa ganaderia de Barcial, con su ganadero Jesús Cobaleda a la cabeza acompañado de mayoral y vaquero que no perdieron detalle de cada matiz, en labores de parar las vacas y auxilio estuvieron invitados el matador Javier Jimenez y "El Topas" quienes estubieron atentos en todo momento y aconsejando cuando los nervios se sobreponian en los chavales. 

Agustín Sanz fue encargado de picar, en exceso en alguna ocasión, con poco acierto en otras, llegando a partir el palo en una de las suertes, hubo de emplearse con alguna de las vacas para que se arrancara de largo en uno de los tres puyazos que como minimo recibió cada una.

Como en todo tentadero lo importante a valorar es la condición de cada animal, dejando el apartado de los chavales al jurado del Bolsín encargado de seleccionar a los becerristas, si diré que hubo variedad, quienes torearon relajados entendiendo a la vaca que le tocó en suerte, otros tuvieron menos fortuna, por rodaje o por las complicaciones que planteaba la vaca, nada fáciles desde la barrera alguna de ellas, menos aún para quien está en la cara.

La primera de ellas derrochó clase, lo dejó patente ya en el caballo, aunque sus pocas fuerzas la hacian perder las manos, cogió la pañosa siempre humillando, permitiendo a los chavales exprimirla alargando los muletazos por ambos pitones.

La segunda puso en serias complicaciones a los chavales, vaca nada fácil que buscaba y reponia con avidez, aprendió rápido y cogió el son antes que sus lidiadores a ella.

La tercera tuvo mas clase que la anterior, sin llegar a romper a buena, habia que ponerle firmeza en todo lo que se la hacia con la pañosa, destacando la labor de uno de los becerristas que la entendió.

La cuarta mejoró a la anterior, aunque como su hermana había que tener firme el pulso y no dudar en los toques de muleta.

La quinta haciendo honor al refranero fue una buena vaca, a la que se podia exigir y respondia a los muletazos metiendo la cara.

La sexta tenia buena condición, aunque acabó rajada buscando tablas, desesperando a los becerristas que veian como tenian que sacar cada escaso muletazo buscando la tecla de la chispa a la preciosa vaca.

Interesante tentadero con una primera, de nombre "Muñolera" que destacó sobre sus hermanas, el resto con sus matices y sobretodo una presentación excepcional en los animales que imponian respeto a todo aquel que tuvo que medirse a ellas.
Acabamos la tarde demasiado pronto, con prisas, ni que uno fuera mal torero! un café ayudó a recobrar el calor y la charla animada con ganaderos se hizo demasiado corta.
Prometemos repetir.