2ª Corrida y cierre de la feria de Iscar con los toros de Sayalero (ambos hierros) con un veterano y dos jóvenes, la terna puso la carne en el asador para brindar una buena tarde de toros.
Abria cartel Luis Bolivar, curtido en mil batallas, con su primero no pudo mas haya que justificarse, un manso con el que se puso por la zurda desde el inicio, antes le habia recibido por verónicas y pasado por la vara sin apreturas, varias tandas en los medios para continuar con la diestra con el toro cada vez mas rajado, acabó por irse a la puerta de los toriles donde a base de tesón y voces sacó algún que otro pase, mató de malas formas y vió silenciada su labor.
El segundo, para Chechu, una lámina de toro, todo quedó en eso, le recibió el de Sanse a pies juntos, con planta firme, un largo puyazo mermó aun mas la poca condición del animal, planteó la faena con la mano diestra, sin demasiado eco, una tanda al natural y vistas las nulas opciones se decantó por matar, dejando media estocada, silencio.
El gato al agua se lo llevó Damián Castaño, hambre de triunfo del joven salmantino que no contaba ni el aniversario de la alternativa, recibió de dos largas cambiadas al de Sayalero, remató de revolera, quitó por chicuelinas antes de parear su cuadrilla desmonterandose ambos. Tras el brindis a los compañeros de "Grana y Oro" comenzó la faena con la pañosa, inteligente estuvo dando los tiempos y distancias que requeria, a mas fue la faena de quilates por ambas manos, se adornó en la parte final antes de coger el acero, un pinchazo en lo alto atracandose de toro y una estocada certera le premiaron con las dos orejas, dando la vuelta al ruedo el toro en el arrastre.
El cuarto tampoco colaboró con Bolivar, mansote y soso el torero, no se entendieron y no cogió vuelo la faena, de uno en uno fue sacando los pases, sin eco en las gradas. lo intentó, si bien sin lucimiento, remató de media estocada efectiva que le valió pasear una oreja cariñosa.
El quinto, otro toro soso, sin chispa que pusiera la emoción que necesitaba el torero, además acortaba en las embestidas, toda vez que queria embestir. Fuera de sitio el torero, de una en una, sin ligar y desconfiando en cada muletazo, pasó un calvario para matar con el descabello sonando un aviso. Silencio
El que cerraba plaza fue una prenda, una prenda de las que mandan al hule y a hacer prenda nueva en el santre, dispuesto estuvo Damián que no quiso rendir armas, intentó torear como si el toro fuera bueno, sacando algún muletazo de largo trazo, un oasis, uno si tres no decia el toro, que además huia de la pelea. Abrevió y mató de estocada certera, quedando silenciada su labor.
Ficha: 1/4 de plaza en la última de feria en Iscar. Toros de Sayalero y Brandés (y Monje)
Luis Bolivar: Silencio tras aviso y oreja
Jose Ramón Garcia "Chechu": Silencio y silencio tras aviso
Damián Castaño: dos orejas y vuelta al toro y silencio.