jueves, 23 de diciembre de 2010

Rito de la vaca enmaromada en Palazuelo de Vedija

Un ancestral rito se viene celebrando desde hace siglos en Palazuelo de Vedija, sus vacas enmaromadas, que recorreran sus calles durante las tardes de fiestas.
Cuebta la historia que esto se hacia para llevar las vacas a los mataderos que habia en los pueblos, y al llegar al pueblo el peligro era inminente si el animal estaba suelto a su suerte, por ello se las enmaromaba, posiblemente muchas de ellas fueran las antecesoras de los que hoy conocemos como Victorinos, las vacas de Albaserrada de la que procede este hierro pastaron durante años en sus prados.
Hoy se las enmaroma por tradición para recodar ese tiempo y que el pueblo y los mas nostalgicos nos reunamos en torno a un mismo motivo, la vaca enmaromada.
Nunca se me olvidarán las tardes en las que con apenas 10 años corria por las calles de Palazuelo con la vaca enmaromada, subido en cualquier reja de ventana y esperando que la vaca echara a correr para bajarme de alli, he llegado a tenerla bajo mis pies, pisandola la testuz y esa sensación de adrenalina no se me olvidará..... ni las palabras del padre de Julio, el electricista del pueblo, gritando para que me subiera mi padre al balcón de su casa y no estubiera tan en peligro con la vaca debajo......
Unos cuantos años después el recorrido se ha mejorado incluyendo un vallado para mayor seguridad y evitar que la vaca pasee a su antojo.
Tres cohetes anuncian la salida de la primera a las calles, los nervios van aflorando tras cada cohete hasta que la ves bajar hacia el mirador que lleva su nombre y te toca tirarte al vacio si no quieres que te arrolle.....Mientras Raúl, enmaroma la siguiente en los corrales.
Carreras y mas carreras, algún que otro quiebro para esquivar la embestida y a seguir zapateando que la vaxa no espera....los cortes no están bien vistos, y esque siempre se han corrido las vacas y se las ha respetado, una caida significa la caida de la fiesta y que la vaca no resista mas carreras. Al acabar una cerveza entre amigos de carrera y afición y hasta la nueva cita que nos reuna al dia siguiente.
Quiero agradecer a su alcalde Salvador, por su gentileza, y por cederme el museo de la vaca enmaromada para la exposición que con el nombre de miradas taurinas expuse alli.
Si unas fiestas tengo marcadas en mayúsculas en el calendario esas son las del vecino PALAZUELO DE VEDIJA.