jueves, 28 de octubre de 2010

festival taurino de Villalpando

Tarde calurosa de agosto, se presentó un festival con toques flamencos, para el matador, Carlos Doyague de Palencia, y los novilleros Angelino de Arriaga, de México y Antonio Boyano, de Villalpando, ante serios novillos de la prestigiosa ganaderia de Sanchez-Espioja, del campo de Ledesma, en Salamanca.
Entre cantes y punteos de guitarra fueron lidiandose los 6 programados para esa tarde.
El primero con una oreja tras pinchazo, y estoque, protestón por el izquierdó llevó al suelo a Doyague, sin más consecuencias.
El segundo, se llevó una oreja tras un pinchazo y estoque, el txacalteca lució el traje corto tipico de su tierra, vaqueros adornados con flecos y una pajarita de exageradas dimensiones.
El tercerofué recibido de rodillas a puertagayola, con una larga cambiada, se fué sin orejas ni rabo, tras darle muerte en una buena estocada, brindó a su público y no falló.
El cuarto en manos de Doyague fue mas noble, dejando pases con la muleta mas vistosos que le dieron las dos orejas tras tres estocadas, siendo la última hasta la empuñadura.
Dicen que no hay quinto malo, y asi fué, un novillo de excepcional trapío y nobleza, al que se le dió la faena mas larga, quizás pasada de tiempo, y al que el propio novillero pidió el indulto que no le fue concedido, y se le concedieron los máximos trofeos.
El sexto y último ante los últimos rayos de sol, dejó el mayor susto de la tarde, que no fue a mas que un intenso dolor en la zona inglinal del novillero local, novillo que se fué sin orejas ni rabo tras darle muerte ya de noche de una estocada certera.